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Llevamos dos años y medio de pandemia, lo que significa que los consultorios médicos y los hospitales están como jamás antes se había visto. Los tiempos de espera son más largos, por lo que es más difícil que nunca recibir tratamiento cuando se necesita. Para algunos de nosotros, esto es una locura sin precedentes. Para otros, nada ha cambiado en absoluto.
Voy a explicarlo. . Piensa en la época prepandémica. Si eres blanco, vas a urgencias por un hueso roto. Te atienden rápidamente. Si expresas dolor, te dan rápidamente medicamentos para ayudarte. Te atienden y te mandan a casa. Si no eres blanco, tu visita es diferente. Esperas un rato en Urgencias, con un hueso roto que te causa dolor. Cuando por fin te admiten, expresas el dolor que sientes y posiblemente te den algún medicamento para ayudarte. Luego te tratan y te despiden.
Un estudio publicado en Physician's Weekly descubrió que los pacientes no blancos tienen alrededor de un 41% menos de probabilidades de recibir medicación para el dolor que los pacientes blancos. Los pacientes negros esperan más tiempo para ser atendidos cuando se quejan de dolores en el pecho, según un estudio del Journal of the American Heart Association.
No debe haber disparidades en la atención de una raza a otra. Tenemos que asegurarnos que el tratamiento médico sea igual para todas las personas.
Soy Kelsey Cunningham y esta es mi perspectiva.
